La estación Roma Tiburtina está estratégicamente ubicada en la zona noreste de Roma, sirviendo como uno de los principales centros ferroviarios de la ciudad. Fue inaugurada en 2011 y está diseñada para acomodar a más de 100,000 pasajeros cada día. La estación actúa como un eje clave tanto para servicios regionales como de alta velocidad, conectando Roma con destinos importantes como Florencia, Milán y Nápoles. Más de 40 trenes salen diariamente hacia destinos como Venecia, Bolonia y Turín. La estación está bien conectada con la ciudad a través del transporte subterráneo, ofreciendo acceso a la Línea B del Metro de Roma y diversas líneas de autobús. Las características notables de la estación incluyen un área dedicada a tiendas y restaurantes, así como instalaciones artísticas a lo largo de la terminal. Las atracciones cercanas para los viajeros con tiempo de espera incluyen la impresionante Basílica de San Lorenzo fuera de las Murallas, aproximadamente a 2 kilómetros de distancia, que se puede alcanzar en unos 25 minutos a pie, y el pintoresco Parco della Caffarella, situado a 3 kilómetros de la estación, accesible en unos 35 minutos. Para aquellos que esperan en la estación, las comodidades cercanas, como un supermercado y varias boutiques, ofrecen opciones de compra.