Kutahya, renombrada por su hermosa artesanía en azulejos y cerámica, alberga la antigua Fortaleza de Kutahya que data de tiempos bizantinos. Partiendo de Kutahya, el tren te lleva a Ekinova, un encantador pueblo conocido por sus paisajes serenos y su rica herencia agrícola. Ekinova, a menudo celebrada por su producción local, muestra el lado más tranquilo de la vida turca. Experimenta la conexión fluida entre estos dos lugares cautivadores.