Tokio, la extensa metrópoli de Japón, ofrece atracciones como el histórico distrito de Asakusa y el moderno cruce de Shibuya. Al salir de la estación de Tokio, el shinkansen te lleva a Nagano, conocida por sus impresionantes montañas y los Juegos Olímpicos de Invierno de 1998. Al llegar, visita el icónico Templo Zenko-ji y los cercanos monos de nieve de Jigokudani. Cada ciudad presenta una combinación única de cultura e historia, haciendo que este viaje sea inolvidable.